La Terapia Inductiva de alta energía basa su efecto en las ondas electromagnéticas. Estas pasan a través de los tejidos recargando sus células y restableciendo su normal funcionamiento.

Su efecto reparador se debe a que el Emfield Pro genera un campo magnético de 3 Tesla, el cual es 600 veces más fuerte que un bar magnético normal. Este potente campo magnético proporciona una gran estimulación a las células nerviosas, músculos, y vasos sanguíneos.

La Terapia Inductiva repara los tejidos lesionados, estimula la producción de fibroblastos y colágeno necesarios para la reparación de los tejidos lesionados, así como en la osteogénesis, la formación de nuevo hueso o en las proteínas factores de crecimiento para recuperar lesiones musculares o ligamentosas.

Es muy efectiva para el tratamiento del dolor y para la regeneración de los tejidos.

Para fracturas, edemas óseos, roturas fibrilares, esguinces, fascitis plantar o tendinopatias resulta muy efectiva, acortando los plazos de recuperación.